Conoce qué son los biocarburantes, descubre los diferentes tipos y las diferencias entre ellos. Explora cómo contribuyen a la sostenibilidad con Nedgia.
Los biocarburantes se agrupan en torno a tres grandes generaciones en base a las materias primas empleadas y cómo son producidos: biocarburantes de primera, segunda y tercera generación.
Los biocarburantes de primera generación son los que tienen origen en plantaciones agrícolas empleadas para el consumo humano como azúcar, almidón, aceite vegetal o aceite de palma y las grasas animales. Los sistemas de producción son más simples y económicos, sin embargo, tienen serias limitaciones pues podrían poner en peligro el suministro de alimentos, así como afectar a la biodiversidad.
Los biocarburantes de segunda generación aparecen por la gran demanda de biocarburantes y son obtenidos de biomasa de naturaleza lignocelulósica: aquella que tiene naturaleza leñosa o fibrosa. Por ello, aunque ayudan al ahorro de emisiones, la forma en que se producen es más laboriosa y compleja que la de los de primera generación. Se producen con cultivos que no se van a destinar a la alimentación o que se consideran desperdicios: aceite usado, tallos, cáscaras de fruta, vainas o virutas de madera.
Los biocarburantes de tercera generación son aquellos que tienen su origen en productos no comestibles o en desechos, pero además están creados a partir de las microalgas. En el caso de estos biocarburantes se utilizan técnicas de biología molecular.
¿Qué es un biocarburante o biocombustible?
Los biocarburantes o biocombustibles son una energía renovable proveniente de la biomasa, que es una materia de origen orgánico (animal o vegetal) que nos permite obtener energía. Los biocarburantes pueden ser sólidos, gaseosos o líquidos y son transformados para reemplazar a los combustibles tradicionales como fuente de energía en los vehículos y otros medios de transporte.
En algunos vehículos se hace necesario la adaptación u homologación para poder funcionar con estos biocarburantes, pero en la práctica los podemos utilizar para sustituir a los combustibles tradicionales, sustituyendo el diésel por biodiésel, por poner un ejemplo.
¿Cuántos tipos de biocarburante existen?
Aunque cada día se innova en la producción de nuevos carburantes y se generan combinaciones con diferentes combustibles ya existentes en el mercado (procesamiento habitual entre los grandes suministradores de combustibles tradicionales), podemos destacar tres biocarburantes principales en el mercado.
- Biogás: El origen principal del gas renovable o biometano es el biogás, que se genera a través de los procesos de degradación de la materia orgánica, como los residuos urbanos, agrícolas o ganaderos. Posteriormente son sometidos a un proceso denominado upgrading, que permite su compatibilidad con el gas natural. El biometano es un combustible frecuentemente utilizado por vehículos con grandes consumos como empresas de reparto, camiones… debido a su capacidad de combustión y a que se alarga la vida del motor.
- Biodiésel: El biodiésel es un biocarburante que podemos utilizar puro o mezclado con el diésel procedente del petróleo para poder ser utilizado en motores de ciclo diésel. Se genera a partir de aceites y grasas vegetales: es muy similar al aceite, simplemente es alterado por una reacción química sencilla que busca la pérdida de viscosidad. Para su producción se utilizan aceites baratos como la palma, la soja o la colza.
- Bioetanol: El bioetanol es un tipo de alcohol inflamable que se obtiene a partir de la fermentación de ciertos tipos de material orgánico, principalmente materia vegetal con alto contenido en celulosa. El bioetanol se puede obtener mediante la fermentación de plantas como la caña de azúcar, los cereales o la remolacha.
Ventajas y desventajas de los biocombustibles
La migración a los biocombustibles de nueva generación es ya una realidad. En Nedgia estamos apostando muy fuerte por estos nuevos biocarburantes para poder tener autonomía como país y ofrecer al consumidor alternativas a los combustibles tradicionales que sean menos contaminantes. Para poder analizar las ventajas o desventajas de cada biocarburante tendríamos que tratar a cada uno de forma individualizada. Hay países como Brasil que son pioneros en el uso de estos biocombustibles, en concreto el gobierno brasileño impulsó en los años 70 el bioetanol como combustible, mezclado con gasolina o en su forma pura. Esta iniciativa, que denominaron Proálcool, fue un éxito rotundo: para finales de 1970 el 90% de los vehículos ligeros comercializados estaba adaptado para usar etanol.
Vamos a enumerar las ventajas de los biocarburantes:
- El precio de los biocarburantes será siempre decreciente frente al de la gasolina o el diésel al tratarse de una tecnología en continuo avance y aceptación.
- El precio de las materias primas utilizadas para su creación es prácticamente nulo al tratarse de residuos.
- Los procesos productivos son más óptimos frente a alternativas como la gasolina, usan menos recursos y son más limpios con el medio ambiente al contaminar menos.
- Es una fuente de energía ilimitada frente a los combustibles tradicionales, que tardan muchos años en generarse.
- Generan empleo a nivel local y especialmente en zonas rurales o en depresión, un ejemplo de ello es nuestro biogás, que ha revitalizado el sector ganadero con alternativas a la venta tradicional de carne y leche en las ganaderías bovinas.
- Reducimos drásticamente las emisiones de carbono y azufre. También las cantidades de basura y desechos, al ser empleadas en estos biocombustibles.
- La seguridad es mayor en cuanto a su transporte y almacenaje frente a los combustibles tradicionales.
En cuanto a las desventajas de los biocarburantes:
- Los fertilizantes nitrogenados empleados en las producciones agrícolas contaminan el medio ambiente.
- Los biocarburantes vegetales pueden aumentar las emisiones de óxido de nitrógeno, a lo que se le suma que pueden contaminar los acuíferos con nitritos y nitratos.
- Los biocarburantes proporcionan menos energía frente a los combustibles tradicionales a igual cantidad de carburante, con lo que para poder igualar los niveles energéticos hay que agregar más materia prima a la producción.
- Algunos científicos alertan del empleo de grandes producciones agrícolas para especies vegetales únicamente orientadas a biocarburante y eso puede reducir la cantidad de alimento disponible, como sucede por ejemplo con la soja, haciendo que el precio de determinados alimentos suba.
- Pérdida de áreas forestales a favor de las plantaciones de estas especies vegetales.
- Uso de grandes cantidades de agua para el regadío.
- Uso de herramienta, maquinaria y transporte que emplea combustibles tradicionales para la producción de los biocarburantes que al final resulta en más efecto invernadero y la deforestación.
Por eso, desde Nedgia, hemos optado por la opción del biogás, que aprovecha directamente los desechos producidos por diferentes partes del sistema: vertederos, granjas de vacas… etc, para innovar y desarrollar nuestro propio gas autónomo e inyectar a la actual red gasística española, sin todos los perjuicios para el medio ambiente que generan el biodiésel o el bioetanol. Esto hace que el gas llegue también a los puntos de distribución para vehículos conocidos como gasineras y que podrás consultar en nuestro mapa. También si quieres conocer más detalles acerca del gas natural vehicular tenemos numerosos recursos en nuestro blog que te ayudarán a entender mejor el funcionamiento de estos gases para vehículos y sus ventajas.